Durango. Sábado noche.
El aire huele a kalimotxo, ego hinchado y decisiones dudosas.
La cuadrilla se ha reunido para celebrar el cumpleaños número 24 de Jaio, el místico viajero que dice cosas como “todo viaje empieza cuando sueltas el control”, justo antes de perder las llaves.
En una esquina del bar, Morales está eligiendo filtro para la foto grupal (“quiero algo que diga: juventud decadente pero con propósito”). 💅
Ortu, con su mosto en la mano, los observa todo desde la calma de quien sabe que en algún punto de la noche le tocará conducir.
Peio explica cómo haría fuego si se apagasen las luces del bar.
Imanol, por su parte, está midiendo el nivel de ruido ambiente con una app que se a descargado.
Y Jaio… Jaio está sonriendo tranquilo, como si supiera algo que los demás no. O como si se hubiera fumado media paz interior.
[[Primera Decision]] El camarero se acerca:
—A ver chavales, ¿qué os pongo?
Aquí empieza la primera decisión de la noche.
[[Opcion A]] Jaio pide vino, “porque el alma merece uvas fermentadas”.
[[Opcion B]] Morales impone ronda de gintónics, “porque la elegancia no se negocia”.
[[Opcion C]] Ortu sugiere agua del grifo, “porque luego nadie paga”.El camarero levanta una ceja.
Nadie ha pedido vino en ese bar desde el 2004, pero Jaio lo hace con una calma que le descoloca.
Cuando llegan las copas, levanta la suya y suelta algo tipo “brindemos por el viaje interior”.
Morales lo mira como si fuese un documental de La 2.
Ortu traga saliva y se promete no intervenir.
Cinco minutos de falsa sofisticación. Luego Jaio se mancha la camiseta y todos se rien.
👉 Resultado: La conversación continua y Jaio comienza a hablar de su viaje a Ankara.
[[Ankara]]Morales toma el mando. “Cinco gintónics”!!!
El camarero asiente sin ganas.
Jaio asiente también, convencido de que el enebro es una metáfora de la vida.
Peio se lo bebe de dos tragos.
Y Ortu se sirve su refresco, testigo sobrio del inminente desastre.
A los diez minutos el volumen del grupo sube mucho.
Peio está en plena tertulia sobre quién del grupo sería el primero en morir en una isla desierta (él dice que Jaio, por “demasiado espiritual”).
Risas. Fotos. Ego.
👉 Resultado: La noche se calienta. Peio propone moverse a otro bar “con más ambiente”.
Ortu duda.
[[Otro bar]]Silencio.
El grupo entero mira a Ortu.
—Ortu, el agua del grifo no tiene ni burbujas —dice Morales.
—Tiene dignidad —responde Jayito el intensito.
Morales se ríe.
Jaio levanta su vaso y dice: “por la pureza!”.
El brindis suena raro, pero sincero.
A los cinco minutos ya nadie se acuerda de qué bebe cada uno.
Ortu observa la escena como quien patrulla un parque de atracciones.
👉 Resultado: La conversación baja de tono. Jaio aprovecha la calma para hacer una confesión que sorprende al grupo.
Morales deja el móvil.
[[Confesion]]La conversación se vuelve más tranquila.
Jaio, apoyado en la mesa, se queda mirando las luces del local un segundo demasiado largo.
“Os voy a decir algo que no he contado todavía”, empieza.
Morales levanta una ceja.
Ortu se cruza de brazos.
Peio bosteza.
[[C1]] La confesión es algo serio que nadie esperaba.
[[C2]] La confesión resulta una tontería monumental y todos terminan riéndose.El grupo sale a la calle entre risas. Durango brilla con ese punto de humedad que lo hace parecer siempre viernes.
Morales ya camina como si lo siguiera una cámara invisible.
Jaio, más tranquilo, comenta algo sobre lo bonito de estar todos juntos antes de “que la vida los disperse”.
Nadie lo escucha del todo, pero se nota que hay cariño.
[[B1]] Acaban en otro bar donde Morales se reencuentra con un viejo ligue.
[[B2]] Se quedan en la calle hablando, y Jaio saca un tema que cambia el ambiente.Jaio empieza a hablar de Ankara con esa mezcla de ilusión y filosofía barata que solo aguanta la primera copa.
Cuenta que se va por “una beca para aprender a ver el mundo de otra forma”
- Ortu: Las pibitas ahi como son?
- Jaio: Receptivas, como nos gustan (justo lo que jaio diria jeje)7
- Ortu: Jaio te gusta lo exotico.
- Jaio: No me cierro a convertirme al Islam.
Todos se rien.
Imanol se interesa por el wifi del país y Peio ya está mirando vuelos “por si acaso”.
Opción siguiente:
[[A1]] Peio propone brindar por los “nuevos comienzos” y las cosas se van de madre.
[[A2]] Ortu saca un regalo para Jaio, serio pero inesperadamente tierno.Peio levanta la copa y dice:
—Por los nuevos comienzos, joder. Y porque alguno de nosotros consiga madurar antes de los 30.
Todos chocan vasos.
Morales lo hace con tanta fuerza que tira medio vino encima de Ortu.
Ortu suspira - pasan 3 segundos - se enfada.
Imanol, emocionado, intenta improvisar una frase profunda y termina diciendo algo de los agujeros negros y la amistad.
Jaio, entre risas, se pone de pie para dar un discurso que nadie le ha pedido. Algo sobre el sentido de la vida y de las becas BEINT como “rito de paso”.
Morales aplaude irónicamente.
Peio grita vitoreandole.
👉 Resultado: Jaio acaba haciendo un brindis místico con el camarero, que se une solo por compromiso.
[[Brindis mistico]]Ortu saca una pequeña bolsa del bolsillo del abrigo y la deja encima de la mesa.
—Es un regalo, pero no os riáis —dice.
Morales ya se está riendo.
Dentro hay una brújula. Antigua, de metal, con el cristal algo arañado.
—Para que no te pierdas, aunque igual te vendría bien el GPS también —dice Ortu.
Jaio se queda un segundo callado, sorprendido.
Luego sonríe de verdad.
El resto se lo toma a cachondeo: Imanol pregunta si apunta al kebab K2 los mejores kebabs de todo durango ohhh si que buenos estan.
👉 Resultado: el grupo se ablanda por un momento.
La noche sigue, pero Jaio no suelta la brújula.
[[Brujula]]El nuevo bar esta lleno.
Morales no lleva ni dos minutos dentro cuando se cruza con un pive que lo mira con cara de “te conozco, pero ojalá no”.
Él sonríe. Por que es popular y tiene la confianza de Regina George.
Jaio observa la escena como si fuera teatro.
Ortu pide agua.
Peio pide fuego.
👉 Resultado: Morales intenta mantener la compostura, pero la conversación se tuerce.
Al cabo de diez minutos, el man se marcha del bar gritando "y gracias por las ladillas....!!"
Morales finge que no le importa, pero le importa.
[[Ladillas]]Se quedan fuera del bar, apoyados en un coche que no es suyo.
Hace frío, pero nadie quiere irse todavía.
Jaio, con las manos en los bolsillos, dice:
—Tíos, ¿os dais cuenta de que igual dentro de unos años no estaremos todos aquí?
Silencio.
Morales intenta hacer una broma, pero se le queda corta (como su pizarrin).
Peio dice “bueno, mientras quede el grupo de WhatsApp”.
Ortu asiente.
Imanol mira al cielo.
👉 Resultado: unos segundos de verdad entre tanta tontería.
Imanol propone Kebap.
[[Kebap]]Jaio traga saliva.
—He estado pensando en quedarme más tiempo fuera. Igual no vuelvo.
Morales se ríe al principio, luego ve que va en serio.
Peio se encoge de hombros.
Ortu baja la mirada.
Imanol lo acepta.
Nadie dice nada un rato.
Luego Peio levanta el vaso:
—Pues brindemos con agua, por los que se van y los que se quedan.
👉 Resultado: el silencio vale más que el brindis.
[[Silencio]]—Os tengo que confesar algo —dice Jaio, serio.
Todos lo miran.
—Creo que… me he enamorado de una dependienta del Eroski. Estoy pensando en quedarme en Durango para camelarmela.
Ortu suspira.
Peio y Morales le chocan la mano.
Imanol se interesa en la chica.
👉 Resultado: la tensión se rompe.
[[Eroski]]Morales vuelve del baño con una sonrisa sospechosa y anuncia:
— He estado pensando: si Jaio tiene brújula, necesitamos destino.
Peio: “Destino: K2, que tengo hambre”.
Ortu niega con la cabeza pero arranca primero.
Jaio, aún con la brújula en la mano, la gira al azar.
—A donde apunte la aguja, allí vamos.
👉 Opción siguiente:
[[A2a|Kebap]] La brújula señala hacia el K2 (obvio).
[[A2b]] La brújula señala hacia un parque y Jaio insiste en seguirla “porque el universo habla”.Durango duerme, las farolas parpadean, y el suelo está cubierto de hojas y botellas de otra noche cualquiera.
Peio se tumba en un banco sin pensarlo.
—El universo habla… pero yo paso de escucharlo.
Imanol intenta hacer girar la brújula con una lata vacía.
—Tiene campo magnético propio —dice, orgulloso.
Jaio se sienta en el césped, tranquilo, mirando el cielo como si esperara una respuesta.
Nadie se mueve durante un rato. Solo el viento, la risa floja, y esa calma tonta que a veces aparece cuando todo está en silencio.
Jaio rompe el momento:
—Pues igual el destino era esto: parar un poco.
Ortu lo mira de reojo.
—O igual el destino era dormir.
[[Reflexion parque]]El camarero, nota que todos estan un poco bebidos e invita Jaio a salir del bar.
👉 Opción siguiente:
[[A1a|B2]] Salen del bar.
[[A1b]] Hablan con el camarero.El K2 brilla al fondo de la calle como una promesa grasienta.
Jaio encabeza la marcha con convicción peligrosa.
—Esto es lo más cerca que vamos a estar de la felicidad esta noche.
Imanol se ríe.
Ortu calcula mentalmente cuántos minutos faltan para arrepentirse. 💩
El kebabero los mira llegar y ya sabe lo que toca. Ni pregunta. Solo asiente.
👉 Opción siguiente:
[[B1a1]] Piden kebab y lo devoran en silencio
[[B1b1]] Se sientan fuera a fumar y charlarMorales está ofendido pero lo disimula fatal.
—No pasa nada —dice—, hay más peces en el mar.
Peio: “y más ladillas, por lo visto”.
Risas generales.
Jaio le pasa una servilleta de bar a Morales como si fuera un pañuelo.
Ortu propone ir a otro sitio “más tranquilo, sin fauna”.
👉 Opción siguiente:
[[B1a]] Deciden pasear hasta encontrar un sitio en el que posarse.
[[B1b|A1b]] Deciden volver al primero y el camarero ya no les deja entrar.Para el paseo hay dos caminos:
👉 Elige:
[[Bidegorri]]
[[La avenida]]La tensión se disuelve un poco.
Peio da un trago largo de agua.
—Tú verás, hermano, pero como te conviertas en turco y no vuelvas, te borro del grupo.
Morales levanta las cejas.
—Eso sí sería madurar.
Jaio se ríe, pero se le nota tocado.
👉 Opción siguiente:
[[C1a]] Alguien cambia de tema y el momento se rompe.
[[C1b]] Jaio decide salir a fumar solo.El silencio dura lo justo para volverse incómodo.
Ortu, fiel a su instinto de control de daños, rompe la tensión:
—Bueno, ¿retirada estrategica?
👉 Elige:
[[Si|Reflexion retirada estrategica]]
[[No|Otro bar]] Jaio propone ir a otro barMUERTEEEE MUERTE POR FUMAR POR QUE FUMAS PEDAZO DE PUTAAAAAA MUERTEEEEEEEE
MUERTE
M
U
E
R
T
E
[[Inicio]] <3Morales, encantado con el drama, dice:
—La del Eroski, ¿eh? Tiene pinta de relación estable.
Risas, bromas, fotos.
Ortu intenta hacer de mediador entre el amor y el sentido común.
👉 Opción siguiente:
[[C2a|B1]] Deciden cambiar de bar
[[C2b|C1b]] Jaio, rezagado, sale a fumar soloY ahí, entre abrigos medio puestos y vasos olvidados, alguien pronuncia las palabras mágicas: “retirada estratégica”.
No suena a derrota, suena a tradición. A ese momento sagrado en el que todos fingen madurez mientras se dirigen hacia la salida.
Porque en Durango, retirarse a tiempo no es rendirse: es saber que la fiesta no se acaba, solo cambia de escenario. Y aunque nadie lo diga, todos piensan lo mismo: que crecer, quizá, es aprender a irse con estilo.
[[Final]]🎉🎉 JAIO ZORIONAK!!!!!!!!!!! 🎊🎊
🎉 Felices 24 mi amor no se de que final habrás llegado aqui. 🎊
No esta muy currada la historia pero me ha llevado un tiempo hacer esta wea, espero que te haya gustado mucho mucho minito lector 📖
Que pases muy buen dia de cumple, te quiero mucho!!!! 🎂🎂🎂🎂🎂El olor a carne y salsa llena el local.
Nadie habla. Solo suena el papel del kebab rompiéndose y alguna risa floja cuando se cae media lechuga.
Morales mastica con aire solemne.
—La felicidad… era esto y no lo sabíamos.
Peio asiente con la boca llena.
—Sí, y cuesta 6,50€.
Imanol acaba el suyo antes que nadie.
[[Reflexion Kebab]]Salen fuera “a fumar”.
Nadie tiene tabaco.
Nadie pide cena.
Nadie dice nada.
Durante unos segundos, se quedan mirando el escaparate del K2 como si esperaran una señal divina.
No llega.
Ortu rompe el silencio:
—Bueno… buen viaje, ¿no?
Jaio asiente con solemnidad absurda.
Imanol murmura algo sobre la termodinámica de la resaca.
Uno a uno, cada cual se va en una dirección distinta.
Sin despedirse.
Sin mirar atrás.
[[Reflexion solitaria]]Nadie dice nada durante un rato.
Solo el sonido del viento entre los árboles y alguna carcajada suelta que flota sin fuerza.
El suelo está frío, las ideas también, pero por algún motivo todo parece tener sentido un segundo.
Quizá el universo no hablaba —solo necesitaba que se callaran un momento.
Y entre el cansancio, la risa floja y el olor a césped húmedo, Jaio piensa que igual crecer no es entenderlo todo, sino aprender a disfrutar cuando nada tiene sentido.
[[Final]]El camararo dice que se les ve muy bebidos y miente diciendo que el bar esta apunto de cerrar.
Morales le mira incrédulo.
—¿Cerrar? ¡Si esto está lleno!
—Sí, bueno… cierre técnico.
Peio se levanta con solemnidad.
—Pues nada, el universo nos expulsa.
Jaio,, asiente:
—Cuando una puerta se cierra, se abre… otra ronda.
Ortu murmurando algo sobre “retirarse a tiempo”.
[[Reflexion retirada estrategica]]El papel manchado, el suelo pegajoso y el silencio compartido.
Nadie lo dice, pero todos lo saben: las mejores conversaciones nunca ocurren cuando toca, ni en los sitios bonitos, sino en estos momentos absurdos, cuando la grasa y el cansancio ya han borrado cualquier pose.
Quizá por eso a Jaio le encanta viajar.
Porque al final no importa tanto el destino, sino el camino…
y con quién te pillan las cuatro de la mañana comiendo un kebab.
[[Final]]Las calles se vacían sin hacer ruido.
Cada uno toma un camino distinto, sin acordarlo, como si el silencio repartiera las rutas mejor que cualquier palabra. 😎😎😎
No hay discusión, ni despedida.
Solo la calma rara de saber que la noche ya dio todo lo que tenía.
Y mientras las luces se apagan una a una,
queda esa sensación leve, casi invisible,
de que seguir juntos no siempre significa ir en la misma dirección.
[[Final]]El bidegorri está casi vacío, solo farolas y el ruido de las zapatillas contra el asfalto húmedo.
Van los cinco, desordenados, hablando a ratos y callando a ratos más largos.
Peio camina sin rumbo, manos en los bolsillos.
—El truco es no tener destino. Así nunca te pierdes.
Ortu resopla.
—El truco es tener horario, hippie.
Morales intenta hacer una story, pero nadie coopera.
Jaio se ríe solo.
—Igual esto es el viaje, ¿no? Ir andando sin saber pa qué.
El parque de skate aparece al fondo, iluminado por un par de farolas.
Silencio breve.
[[Reflexion skate]]Todo cerrado.
Todo oscuro.
Ni un alma.
Peio rompe el silencio:
—Planazo, ¿eh? Turismo postapocalíptico por Durango.
Ortu asiente.
—Lo bueno es que no hay colas.
Dan la vuelta sin decir mucho.
Y al volver, ahí está: el Pause And Play, brillando como Las Vegas pero con olor a moqueta.
Morales sonríe.
—El destino… siempre ofrece segundas oportunidades.
👉 Opción siguiente:
[[Reflexion casino]] Entran.
[[Reflexion solitaria]] Cada uno marcha a su casa por su lado.Al final, todos acaban haciendo el tonto en el parque de skate.
No es el lugar, ni la hora, ni el estado físico adecuado.
Pero da igual.
Hay algo en esas risas torpes, en los tropiezos y en la sensación de que la noche ya no tiene propósito, que los deja en paz por un momento.
Nadie graba nada, nadie busca sentido.
Solo están ahí, riéndose de sí mismos, del día y del cansancio.
Y quizá eso sea crecer también: seguir haciendo el tonto, pero sabiendo que esos ratos valen más que cualquier plan que sí tenía sentido.
[[Final]]El Pause And Play no es acogedor, pero al entrar se siente como un abrazo con olor a calefacción y derrota.
Nadie dice nada, pero se quedan.
No les gustan los casinos -demasiada tristeza-
pero el calor y las risas amortiguan el rechazo.
Morales mete 10 euros en la ruleta “por la ciencia”.
Diez minutos después ya debe 90 más.
Jaio lo aplaude con solemnidad:
- Eres el único que pierde y da espectáculo.
Y entre el sonido metálico de las tragaperras y el eco de su propia risa,
Jaio piensa que igual eso también es parte del viaje:
no saber muy bien qué haces ahí,
pero estar bien porque no estás solo.
[[Final]]